¿Por qué es más barato conducir con neumáticos ecológicos?
Según un estudio, circular durante una década con neumáticos ecológicos con cambios cada 45.000 km, resulta más barato que caminar diez años con las mejores zapatillas deportivas del mercado reponiéndolas cada 2 años.
Las matemáticas no fallan: un usuario de zapatillas deportivas de marca
tendría que comprar hasta 5 pares en una década, con el consecuente
desembolso de 450 euros. Sin embargo, el conductor de un turismo destinaría sólo entre
200 y 300 euros en neumáticos ecológicos, teniendo en cuenta el ahorro de
combustible que logra gracias a este tipo de neumáticos que economizan de 5 a 7 litros de
gasóleo o gasolina cada 1.000 km.
Los neumáticos ecológicos, además, tienen mayor vida útil, y el gasto que suponen en un conducto que utiliza su coche de 11 a 12 años con un kilometraje de 14.000 km anuales, llega prácticamente a equilibrarse con el ahorro de combustible que estos neumáticos ecológicos generan.
Los usuarios que recorren entre 155.000 y 170.000 km, en números redondos, durante los 11 a 12 años de vida útil de su turismo necesitan 3 juegos de neumáticos ecológicos de reposición contando las cubiertas originales usadas durante los primeros 40.000 km. Cada juego rondaría 340 euros (los 3 un desembolso de 1.020€).
El ahorro total de carburante obtenido oscilaría entre un mínimo de 575€ y un máximo de 900€. Así, el balance entre gasto en cubiertas y economía de combustible se situaría entre 220€ y 445€. Es decir, saldría más barato rodar siempre con cubiertas de esta clase que caminar durante una década con las mejores Adidas o Nike.
Neumáticos ecológicos: la mejor opción
El conductor que apueste por un neumático de gama superior tendrá que desembolsar más de 300€ una vez cubiertos los 40.000 km. Si cambia de neumáticos 3 veces en 11/12 años, el gasto asciende a unos 900€ sin haber economizado el carburante.
Tampoco parecen merecer la pena los neumáticos baratos ya que, durante el mismo período de tiempo, necesitarán ser cambiados de 4 a 5 veces. Si el precio medio es de 200 euros para cada juego, el desembolso puede oscilar entre los 800€ y los 1.000€, sin ahorrar combustible.